59.Cordón Umbilical
Establecemos un cordón umbilical con la energía divina, asegurando un constante resplandor de la Luz en nuestra vida, especialmente para esos momentos cuando terminamos en un lugar de total oscuridad..
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Cuando los Israelitas vagaban por el desierto tras su huída de Egipto, está escrito que seguían a la nube del honor, literalmente una nube que les mostraba hacia dónde debían dirigirse, cuándo debían hacerlo y cuándo debían detenerse.
Eso era algo estupendo; lo malo es que nosotros no tenemos una nube que nos muestre el camino que debemos tomar en nuestras vidas.
Bueno, de hecho sí la tenemos. No es una nube de por sí, sino que son más bien mensajes o señales. ¿Has tenido alguna vez uno de esos momentos "mensaje": algo que un amigo dijo, un pasaje que casualmente encontraste al abrir un libro, un trozo de papel que no pudo quedarse en la papelera?
Tenemos que darnos cuenta de que recibimos orientación divina a diario; sólo necesitamos aprender a escuchar.
Leí en alguna parte que tan solo escuchamos un 8% de lo que nos dicen. ¡Un 8%! ¿Qué hacemos con el 92% restante?
Para crecer espiritualmente y recibir orientación relativa a cuáles son los mejores pasos que podemos dar en cada momento, debemos comprometernos a escuchar a todo el mundo, sin importar cuán aburrida sea esa persona o lo mucho que estemos en desacuerdo con ella.
Nunca se sabe cuando el cosmos está intentando hacerte llegar un mensaje.
Esta idea de que debemos escuchar a todo aquel que esté a nuestro alrededor puede ser algo difícil de aceptar; aunque esa persona nos vuelva totalmente locos.
Eso no significa que tengamos que hacer todo lo que los demás nos dicen; sólo debemos estar abiertos.
Por ejemplo, podemos estar sentados escuchando una charla de una hora de duración de alguien que no podemos soportar. ¿Pero y si resulta que dentro esa hora está oculta la respuesta a la pregunta que siempre hemos querido que nos respondan?
Nuestro trabajo consiste en encontrar la verdad y descartar el resto. Sin duda puede resultar incómodo, pero sólo durará unos instantes. Además, cuando perseguimos el confort, estamos garantizando un dolor y sufrimiento continuos.
Esta semana es una semana increíble para recibir mensajes. Cuanto más aprendemos a estar abiertos al flujo constante de mensajes que la Luz nos envía, más podemos elevarnos más allá del mundo fragmentado en el que vivimos.
Todos tenemos la capacidad de ser grandes canales.
Después de todo, la Kabbalah en sí misma significa recibir. Estamos aquí para ser mejores receptores en todos sentidos.
Cuando aprendemos a seguir las señales que se nos ofrecen, vamos en el buen camino.
Todo lo mejor,
Todo lo mejor,
Yehudá
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